Donald Trump no podrá acabar con la protección legal concedida por su predecesor a los inmigrantes indocumentados que llegaron a Estados Unidos siendo unos niños. El Tribunal Supremo ha fallado en contra de las intenciones de la Casa Blanca para derogar el DACA, el programa que ha permitido a los llamados 'dreamers', cerca de 800.000 jóvenes inmigrantes, trabajar legalmente en el país sin miedo a ser deportados.

NUEVO REVÉS JUDICIAL

La decisión es una victoria mayúscula para los derechos de los inmigrantes y un nuevo revés judicial para el presidente y sus aliados republicanos, después de que el Supremo prohibiese la semana pasada la discriminación laboral de los gays y los transgénero.