El asunto privado del divorcio entre el presidente del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, y su esposa, Veronica Lario, ha alcanzado rápidamente la esfera política al llegar al Parlamento. La oposición progresista ha pedido explicaciones al jefe del Ejecutivo sobre su presunta relación con una menor mientras los obispos demandan sobriedad al dirigente.

En este contexto, portales especializados de internet y la misma prensa escrita se están planteando dudas sobre la autenticidad de las fotos de la ya famosa fiesta por el 18º cumpleaños de una joven de Nápoles, divulgadas por una televisión de Berlusconi con el intento de disipar cualquier suspicacia y duda.

Italia de los Valores, partido del exmagistrado Antonio Di Pietro, ha presentado un ruego parlamentario dirigido a Berlusconi, preguntándole "si se corresponde con la verdad" todo lo que ha declarado su esposa. Sobre la fiesta de cumpleaños de Noemi Letizia, Veronica Lario había dicho: "¡Ojalá fuera hija suya!", subrayando que, de ser así, se habría tratado del mal menor. La misma joven, entrevistada el primer día por los diarios locales, dijo llamar "papi" a Berlusconi y viajar con frecuencia a Milán y a Roma para visitarle. "El pobre no tiene tiempo para venir siempre a Nápoles", había dicho la chica, que acaba de alcanzar la mayoría de edad.

CRITICAS "No podemos hacer ver que no ha sucedido nada. En el país no pueden existir dudas sobre la naturaleza de las relaciones entre el jefe del Gobierno y una menor", declaró ayer la católica Rosi Bindi, miembro de la dirección del Partido Democrático (PD). "Berlusconi tiene que dejar de decir esta cosa patética de que este asunto es un complot de la izquierda", afirmó Dario Franceschini, líder de los progresistas. "Nos estamos comportando como personas serias", dijo Franceschini, para añadir que Berlusconi intenta "tapar la cuestión y despistar la atención de los italianos".

"Patético lo es solo Franceschini", le contestó Paolo Bonaiuti, portavoz de Berlusconi, que zanjó el tema diciendo que "son chismorreos de los diarios".

El rotativo Avvenire , propiedad de los obispos italianos, dedicó ayer al tema un largo editorial que termina así: "Continuamos cultivando la petición de un presidente que, con sobriedad, sepa ser un espejo, lo menos deformado posible, del alma del país".

"LA PASTA HUMANA" El diario escribe que "un hombre de Gobierno se juzga por lo que hace ..., pero la pasta humana de un líder, su estilo y los valores con los que rellena su vida, no pueden dejar indiferentes".

Las crónicas de palacio transmiten desde este fin de semana la imagen de un Berlusconi preocupado por los frentes abiertos. Desde la perspectiva de un pleito por divorcio, que sería largo y expuesto a despliegues informativos, hasta el destino del voto de los dos millones de católicos que se identifican con el Pueblo de la Libertad, el partido de los conservadores. Los sondeos revelan que, de momento, no existiría ninguna hemorragia de votos.

En el frente mediático, se han abierto ya portales de internet que se ofrecen para retocar fotos de fiestas de cumpleaños añadiendo a Berlusconi.