Los servicios secretos británicos han sido víctimas del timo del talibán. Los agentes del MI6 se han dejado engañar por un impostor que se hizo pasar por un alto responsable de los talibanes. El hombre, al que tomaron por el mulá Ajtar Mohamed Mansur, un exministro del Gobierno talibán, y con el que empezaron a negociar un posible acuerdo de paz, sería en realidad un tendero paquistaní. El falso insurgente se ha esfumado, después de haber recibido decenas de miles de dólares de los hombres de la inteligencia británica.

Los abochornados agentes de Su Majestad habían invitado al defraudador a varias reuniones con funcionarios del Gobierno afgano, según han declarado el jefe de personal del presidente Hamid Karzai. El timador habría participado en tres de estos encuentros de alto nivel, según relata la prensa americana y británica, llegando a ser trasladado en un avión de la OTAN. Las citas tuvieron lugar en el palacio presidencial, durante los pasados meses de julio y agosto. Los hombres del MI6 estaban al parecer convencidos tener en sus manos un gran asunto.

CREDULIDAD "El servicio de espionaje británico ha mostrado ser crédulo y por nuestra parte hemos tomado nuestros deseos por realidades", declaró un alto responsable afgano al diario The Times. Otra fuente próxima al caso consultada por el diario, describió lo ocurrido como "una enorme metedura de pata". Las dudas comenzaron a surgir cuando un afgano que conocía al mulá Mansur no le reconoció al ver al falso negociador.

"La lección que sacamos de todo esto es la siguiente: los socios internacionales no deben echar las campanas al vuelo demasiado pronto en este tipo de asuntos", declaró a The Washington Post Umer Daudzai, el jefe del personal del presidente Karzai. La impresión es que el MI6, la CIA y los funcionarios afganos están tratando de echarse la culpa unos a otros por lo ocurrido.

Un antiguo representante estadounidense en Kandahar, Bill Harris, aseguró a The Times que el error no es responsabilidad únicamente de los británicos, porque "una estupidez de este tipo es generalmente el resultado de un trabajo en equipo".

La identidad del timador era hasta anoche un misterio. Funcionarios estadounidenses han sugerido que se trata de "un tipo británico", otros creen saber que es un tendero de la ciudad paquistaní de Quetta y hay quienes apuntan a un avispado agente de los servicios de inteligencia paquistanís. El Gobierno de Londres se negó a comentar "asuntos operacionales" y no ofreció información sobre el caso.