La empresa Tepco, encargado de la gestión de la central nuclear de Fukushima, muy dañada tras el terremoto y posterior tsunami que asoló el noreste de Japón el pasado 11 de marzo, ha confimado este martes que el combustible en los reactores 2 y 3 está parcialmente fundido. Esto significa que los tres reactores activos en la planta japonesa con combustible en su interior sufrieron fusiones parciales después del terremoto. Tepco ha asegurado que este hallazgo no empeorará la situación en la planta. Según la compañía, la mayor parte de las barras de combustible nuclear dentro de los reactores 2 y 3 se fundieron unos cuatro días después de la catástrofe. Asimismo, la empresa ha admitido que las vasijas de presión donde están encapsuladas las barras podrían haber sufrido daños. Esto último supondría que el agua empleada para enfriarlos, que contiene radiación alta, se estaría vertiendo a la vasija de contención primaria de las unidades. El caso de la unidad 1 La eléctrica ya anunció a mediados de este mes que la mayor parte de las barras de combustible en el interior del reactor 1 sufrieron una fusión horas después del desastre y perforaron la vasija de presión e incluso la de contención primaria, por lo que el agua podría estar inundando el edificio que contiene la unidad. Es por ello que gana peso la tesis de que esto mismo ha pasado en los reactores 2 y 3. El pasado 17 de mayo, los responsables de Fukushima ya anunciadon que cambiarían su plan de inundar con agua los reactores afectados para enfriarlos. Tepco confía en que los sistemas de refrigeración funcionen en verano y poder llevar todos los reactores a un estado de "parada fría" para el próximo mes de enero.