El Ejército de EEUU ha detectado casos de torturas en, al menos, seis centros de detención bajo el control del Ministerio de Interior iraquí, según reveló ayer el diario The Washington Post. Algunos de los presos tuvieron que ser ingresados en hospitales. Muchos tenían varios huesos rotos, fuertes contusiones en la espalda, brazos y piernas o quemaduras de cigarrillo en el cuerpo.

La inspección fue llevada a cabo por un equipo formado por estadounidenses e iraquís, poco después de que el pasado noviembre soldados de EEUU hallaran en Bagdad una cárcel clandestina en un edificio del Ministerio de Interior, con más de 170 detenidos, la mayoría sunís, todos con síntomas de torturas. Washington cree que hay más de 1.000 centros de detención en manos de las cuerpos de seguridad.

Según el Post, dos de los seis centros están bajo custodia de la Brigada de los Lobos, cuerpo de la policía iraquí formado por shiís. Añade que sólo se llevó a otras cárceles a un grupo de detenidos. El resto se quedó con los carceleros. K. A.