Ningún miembro del contingente español desplegado en Irak, en su gran mayoría pertenecientes a la Brigada Extremadura XI, ha sufrido daños tras los ataques de anoche sobre bases de la coalición internacional contra el Daesh amparada por la ONU, ha confirmado este miércoles el Ministerio de Defensa, que ha asegurado que los militares españoles están "tranquilos".

Defensa ha explicado que las bases que han sufrido los impactos no contaban con personal perteneciente al contingente español y ha destacado la "normalidad" en la base de Besmayah, donde se encuentran las tropas españolas.

Un contingente de 489 efectivos de la Brigada Extremadura XI participan en esta misión internacional en Irak, integrada en su totalidad por 550 militares españoles, los cuales están "tranquilos", según Robles, que está en contacto permanente con el contingente desplegado en este país asiático.

Estos militares están desplegados en la base Gran Capitán de Besmayah, a unos 30 kilómetros al sureste de Bagdad, más otras tres en la capital del país.

Más de una decena de misiles balísticos han impactado en las últimas horas en dos bases aéreas que albergan tropas estadounidenses en Irak y, según el Pentágono, está claro que los cohetes "se lanzaron desde Irán".

En Bagdad se encontraban desplegados trece militares españoles como parte de la operación de la OTAN en Irak, pero diez han sido trasladados a Kuwait después de que la organización internacional haya decidido "reposicionar" temporalmente a parte de su personal en Irak a diferentes localizaciones dentro y fuera del país.

Con esta medida preventiva, la OTAN trata de proteger a su personal por la escalada de la tensión tras el ataque estadounidense que mató al general iraní Qasem Soleimaní en Bagdad.