El primer ministro de Haití, Jean Max Bellerive, se ha mostrado hoy convencido de que la cifra de víctimas mortales causadas por el seísmo registrado el pasado martes superará las 100.000 personas y que serán tres millones los afectados por la destrucción parcial o total de sus viviendas.

Bellerive declaró en la capital haitiana que han sido retirados ya más de 70.000 cadáveres y mencionó como "incalculables" los enterrados o incinerados por las propias familias de las víctimas y las fuerzas de la Misión de Estabilización de la ONU para Haití (MINUSTAH).

El primer ministro agregó que unas 300.000 familias se han quedado sin vivienda, lo que elevaría el total de personas sin techo a 1,5 millones, dado que estimó en cinco el número medio de habitantes por cada casa.