Keith Stansell, Marc Gonsalves y Thomas Howes, los tres estadounidenses secuestrados hace cinco años por las FARC, fueron vistos bañándose en un río hace pocos días. Varios soldados que patrullaban por una zona del sur del país los vieron desde el otro lado del cauce, pero no pudieron hacer nada porque carecían de los medios adecuados para intentar una operación de rescate.

"Los reconocieron porque los oyeron hablar en inglés", explicó el ministro de Defensa colombiano, Juan Manuel Santos. Los tres rehenes estadounidenses son contratistas del Pentágono; para las FARC, en cambio, son espías de la CIA.