Un tribunal militar de Kisangani, en el nordeste de la República Democrática del Congo (RDC), volvió a condenar hoy a muerte por asesinato y espionaje a dos ciudadanos noruegos, cuya sentencia fue anulada en abril pasado por un tribunal superior castrense de Kinshasa, informó la emisora Radio Okapi.

Los noruegos Joshua French, de 28 años, y Tjostolv Moland, de 29, fueron hallados culpables en septiembre del año pasado de espionaje, de portar armas de guerra y asesinar a su conductor, un congoleño, en una carretera de Ituri en la Provincia Oriental de la RDC y el tribunal ratificó la sentencia en diciembre.

El pasado abril, el tribunal superior militar de Kinshasa ordenó la repetición del juicio al considerar que habían existido irregularidades y no se habían respetado los derechos de los procesados, después de que el Gobierno congoleño asegurara a las autoridades noruegas que no serían ejecutados.

Según Radio Okapi, patrocinada por la ONU, la pena puede ser conmutada y sustituida por la de cadena perpetua, que los dos ciudadanos noruegos deberían cumplir en una prisión militar de Kisangani.

Además de la pena de muerte, el tribunal ha impuesto una multa de 4.100.000 dólares a los dos condenados que, si no hacen efectiva, deberá pagar el Estado noruego.

FUEGO CRUZADO

En el proceso anterior, ambos hombres, que inicialmente se declararon inocentes, afirmaron que el chófer, Abedi Kasongo, había muerto en el fuego cruzado durante un tiroteo con un grupo de bandidos que los atacó.

Posteriormente, Moland admitió su culpabilidad, mientras que French siguió alegando haber actuado en legítima defensa durante el ataque.

Según los jueces congoleños, los dos condenados tenían cartillas militares de Noruega válidas y por consiguiente los consideran miembros activos de la Fuerzas Armadas de ese país que llevaban a cabo actividades de espionaje en el este de la RDC.

Las autoridades de Oslo han negado el cargo de espionaje y afirman que Moland y French dejaron el servicio militar activo en 2007.