Las tropas de Muamar el Gadafi siguen este lunes su avance hacia la ciudad de Bengasi, en el este del país, principal bastión de las fuerzas rebeldes. El Ejército libio ha recurrido a la artillería pesada y a bombardeos aéreos para reconquistar, una tras otra, las poblaciones controladas por los opositores. Después de reconquista Al-Uqaila, en la carretera de la costa, y de Al-Bicher, un poco más al este, las tropas del régimen han tomado el control de Brega, un estratégico enclave petrolero situado a 240 kilómetros de Bengasi. Decenas de rebeldes han huido de Brega en dirección a Ajdabiya a bordo de vehículos en los que transportaban baterías antiaréas. "Los terroristas huyen. Hemos liberado Zauiya, Al-Uqaila, Ras Lanouf y Brega, y el Ejército avanza para purgar el resto de regiones", ha explicado el coronel Milad Hussein, portavoz de las fuerzas de Gadafi. El comandante de los insurgentes, el general Abdel Fattah Younis, aseguró a última hora del domingo que Ajdabiya es una ciudad "vital" y que los rebeldes la defenderán hasta el final. Mientras, en Bengasi, la euforia de las primeras semanas de la revulta contra el régimen ha dado paso a la inquietud ante el avance de las tropas gubernamentales. "Tenemos miedo de lo que pueda pasar, de los bombardeos", ha apuntado Mohamed Gepsi, un veterano funcionario. Confianza en Occidente Todas las líneas de telefonía móvil han sido cortadas y los libios fijan sus miradas en Occidente. "Los occidentales nos quieren ayudar. Con ayuda de Dios y con la creación de un espacio de exclusión aérea recuperaremos la ventaja", ha señalado Abdul Salam Elamari, un empleado de oficinas. Pero la comunidad internacional actúa con prudencia. Después de que las reuniones de la OTAN y de la UE hayan concluido sin ningún acuerdo sobre la imposición de un espacio de exclusión aérea, el G-8 celebra este lunes en París un encuentro en el que Francia espera recabar apoyos para crear una zona de exclusión aérea. El sábado, la Liga Árabe ya dio su visto bueno a tal medida y emplazó a la ONU a autorizar la medida que busca evitar los bombardeos y proteger a los civiles.