El Túpolev-154 que hoy se ha estrellado en Rusia en el siniestro en el que ha muerto el presidente polaco, Lech Kaczynsnki, y otras 95 personas, es un avión ruso cuyo primer modelo se fabricó hace 42 años y que ha sufrido 15 accidentes graves desde 1990 en los que murieron unas 1.200 personas.

El mayor accidente de un Túpolev-154 ocurrió el 22 de agosto del 2006, cuando uno de estos aviones se estrelló en el este de Ucrania al intentar un aterrizaje de emergencia tras ser alcanzado por un rayo, lo que causó la muerte de 169 personas, 45 de ellas niños.

Algunos medios rusos han recordado hoy que el Túpolev-154 es un modelo con una vida útil muy larga y de gran calidad, sobre todo en el caso de un avión presidencial. Según fuentes polacas, el avión en el que viaja el presidente tenía equipos modernos y había pasado las revisiones pertinentes.

Nuevos motores

El modelo entró en servicio comercial con la compañía rusa Aeroflot en 1971 y fue modernizado en 1986, cuando se le incorporaron nuevos motores para mejorar su rendimiento energético y su nivel de sonido. La versión más reciente, llamada Tu-154M, comenzó a operar en 1982.

El Túpolev-154 es un avión de alcance medio, 4.000 kilómetros, y ha sido el más utilizado por la aerolínea Aeroflot y sus sucesoras tras la extinción de la Unión Soviética.

Movido por tres reactores, fue considerado la respuesta soviética al Boeing 727 estadounidense y al Trident británico.

Su longitud, en su última versión, el TU-154M, es de 47,9 metros, su envergadura alcanza los 37,5 metros y transporta entre 164 y 180 pasajeros a una velocidad media de entre 850-900 kilómetros por hora a 11.000 metros de altitud de crucero.

El constructor más antiguo del mundo

La empresa Túpolev, fundada y dirigida durante mucho tiempo por Andrey N. Túpolev, celebra en el 2010 sus 88 años de existencia, y es considerada la más antigua del mundo.

Durante todos esos años, Túpolev ha diseñado más de 300 proyectos de aparatos aéreos, de los cuales 40 llegaron a ser producidos en serie. Sin embargo, también ha tenido que superar los numerosos accidentes de sus todos sus modelos, al menos una treintena desde 1990.