La Unión Europea (UE) expresó ayer su preocupación por el informe de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), que afirma que las fuerzas sirias utilizaron ese tipo de armamento en Hama en el 2017, asegurando que contemplará nuevas sanciones por ese caso.

«La UE ya ha impuesto previamente medidas restrictivas a altos funcionarios y científicos sirios por su papel en el desarrollo y uso de armas químicas, y está dispuesta a considerar introducir más medidas si lo ve apropiado», indicó el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, en una declaración en nombre de los Veintisiete.

El Equipo de Investigación e Identificación (IIT) de la OPAQ concluyó este miércoles en un primer informe que las fuerzas del presidente sirio, Bashar al Asad, usaron gas sarín o cloro en al menos tres ataques contra la ciudad de Ltamenah, en la provincia de Hama, en el año 2017.

La OPAQ responsabilizó así al régimen sirio del uso de armamento prohibido por primera vez en nueve años de guerra civil en el país de oriente próximo.

Borrell aseguró que respaldan «completamente» los hallazgos del informe. «Tomamos nota con gran preocupación de sus conclusiones», aseveró, a lo que añadió que «la UE condena fuertemente el uso de armas químicas por la Fuerza Aérea de Siria». «Aquellos identificados como responsables por el uso de armas químicas deben rendir cuentas por estos reprobables actos», aseveró.

Según dijo el representante de la UE, la responsabilidad es «esencial para evitar que vuelvan a emerger las armas químicas», cuyo uso es «una violación de la ley internacional» y puede llevar a crímenes de guerra y contra la humanidad.

El jefe de la diplomacia europea aseveró, además, que «no se tolerará impunidad para estos actos horribles», y que ahora le corresponde a la comunidad internacional «considerar el informe y tomar las acciones apropiadas». Desde la UE, subrayó que están determinados a asegurar que «esta clara violación de los principios centrales de la Convención recibe la respuesta más fuerte posible de los Estados parte de la Convención de las Armas Químicas».

Por último, Borrell mostró el compromiso de los Veintisiete con la entidad que ha elaborado el informe. «La UE está comprometida, al más alto nivel, a apoyar a la OPAQ en sus esfuerzos por implementar la decisión de los Estados parte, de junio del 2018, para aplicar disposiciones que identifiquen a los responsables del uso de armas químicas en Siria», concluyó.

La reacción del Gobierno sirio fue de rechazo al trabajo de la OPAQ, como manifestó este jueves su Ministerio de Exteriores, que lo tildó de «fabricado».

«El informe del IIT de la OPAQ sobre el uso de sustancias químicas en Ltamenah en el 2017 es engañoso e incluye conclusiones falsas y fabricadas con el fin de acusar al Gobierno sirio», indicó en un comunicado.

Afirmó que «no tiene ni pies ni cabeza» este trabajo, el primero de la OPAQ que responsabiliza al Ejecutivo sirio del uso de armamento prohibido en tres ataques entre el 24 y 30 de marzo del 2017 con gas sarín y cloro sobre la población civil de Ltamenah.

En el comunicado se apunta que esta investigación de la OPAQ «ilegal» se basa en «fuentes fabricadas por los terroristas del Frente al Nusra», haciendo referencia a «los cascos blancos que siguen las instrucciones de Estados Unidos y Turquía». Los llamados cascos blancos son un cuerpo de rescate que opera en zonas que escapan al control de Damasco, respaldados por Ankara y Washington.

Reiteró la fuente que el Ejército sirio no ha usado «armas químicas en Ltamenah o en ninguna otra ciudad» del país. Además, señaló que el informe es «otro escándalo de la organización y del equipo de investigación junto al escándalo del informe de Duma del 2018».

El Gobierno sirio hace alusión con esto último a la denuncia de la OPAQ el pasado febrero de que dos de sus exempleados filtraron detalles «incompletos» sobre la investigación del ataque químico en la localidad siria de Duma de abril del 2018. El IIT ha estado investigando estos incidentes entre junio del 2019 y el pasado mes de marzo.