Un niño británico de 10 años se ha convertido en la primera persona en recibir un trasplante de tráquea utilizando células madre del propio paciente para reducir las posibilidades de rechazo sin necesidad de inmunosupresores. El pequeño padecía una estenosis traqueal congénita, que se caracteriza por un estrechamiento de las vías respiratorias.

Antes del trasplante, que se prolongó durante nueve horas en el hospital Great Ormond Street de Londres, los médicos han extraido células madre de la médula ósea del paciente para cultivarlas junto a la tráquea de un donante.

Los médicos han reducido la tráquea a su pura estructura de colágeno y posteriormente le han inyectado las células troncales que los médicos confían en que se transformen en células especializadas que conformen el interior y el exterior de la nueva tráquea.

LA MEJOR ALTERNATIVA

El paciente había sido sometido a varias operaciones para ensanchar ese órgano, pero en noviembre sufrió complicaciones y el trasplante se convirtió en la mejor alternativa.

Hace dos años la colombiana Claudia Castillo se convirtió en la primera persona del mundo en recibir una tráquea que había sido cultivada previamente con células madre de su médula espinal.

Actualmente, Castillo lleva una "vida normal" sin necesidad de tomar los fármacos inmunosupresores que se suministran a los pacientes que han recibido algún trasplante, para evitar que su cuerpo rechace el órgano.