El violentísimoterremoto de 6,5 grados que ha golpeado de nuevo el centro de Italia a las 7.40 horas de este domingo "no ha provocado muertos, pero sí varios heridos", según Protección Civil . La potentísima onda expansiva ha echado a la calle a los habitantes de casi toda la península italiana. El epicentro se encontraría entre Castelsantangelo, Norcia y Preci, localidades yagolpeadas por el terremoto del pasado jueves.
Helicópteros y aviones están sobrevolando la zona afectada para comprobar los daños causados. Varias personas han sido sacadas con vida debajo de algunos caseríos desplomados de la región.
Después de cuatro seísmos de más de cinco grados en dos meses, Fabrizio Curcio, responsable de Protección Civil, ha solicitado la colaboración de los ciudadanos para que acepten irse a otros lugares y no quedarse al lado de sus casas derrumbadas. "Si no quieren irse, les obligaremos a la fuerza", han avisado los bomberos que trabajan en la zonas afectadas.
La región ya había sido golpeada el pasado 26 y el 24 de agosto por seísmos de 6.0 y 5.9, que provocaron 290 muertos. El epicentro se encuentra a 180 kilómetros de Roma y a 10 kilómetros de profundidad, según el Instituto Italiano de Vulcanología.
La mayoría de los habitantes de la vasta zona situada en los Apeninos ya se encontraba en otras localidades, lo que ha ahorrado nuevos muertos. Un convento de monjas ha sido deshalojado con la fuerza en Amatrice y las monjas salieron corriendo del lugar hasta una plaza cercana.
EL PATRIMONIO ARTÍSTICO DE LOS APENINOS
Lo más afectado ha sido, por el momento, el vastísimo patrimonio artístico y monumental de la zona apenínica, una especie de columna vertebral que recorre toda Italia.
En Amatrice, ciudad-símbolo del seísmo de agosto, se ha venido abajo la torre del municipio y nuevos edificios del centro histórico ya deshabitado. De la catedral de Norcia, importante ciudad turística de la región, queda solo un esqueleto. El hospital de Cascia ha sido evacuado y la Salaria, arteria central de los Apeninos, que atraviesa Italia desde Roma hasta el sur de Venecia, ha sido cerrada al tráfico. Los trenes regionales de las autonomías afectadas han sido suspendidos y en Roma se han cerrado las tres líneas de metro.
REVISIÓN DE LOS MONUMENTOS DE ROMA
La sacudida ha despertado a la mayoría de habitantes de Italia, desde los Alpes hasta la punta de la bota italiana. En Roma, expertos de Bellas Artes, bomberos y Protección Civil, revisan el estado del Coliseo, de los Foros Imperiales y del palacio presidencial del Quirinale, que ha suspendido las visitas dominicales y un concierto. Según las primeras informaciones, un ascensor vacío se ha caído en un barrio de la periferia. La basílica de San Pablo Extramuros ha sido también cerrada.
"Es la jornada más oscura que jamás haya conocido", explica Giuseppe Pezzanesi, alcalde Tolentino. "Se ha venido todo abajo", ilustra el primer ciudadano de Arquata del Tronto, epicentro del seísmo de agosto. "Los daños son irreprables y las personas no pueden más", ha añadido Pezzanesi.
"SE HA ABIERTO LA TIERRA A NUESTROS PIES"
"Se ha abierto la tierra a nuestros piés”, ha explicado Mauro Falcucci, alcalde de Castelsantangelo sul Nera, epicentro de la sacudida del pasado jueves. “Aquí se ha hundido todo, veo columnas de humo, es un desastre, un desastre, mientras dormía en el coche he visto el infierno”, ha sido el dramático relato de Marco Rinaldi, alcalde de la aldea de Ussita, realziado en directo por teléfono pocos segundos después del temblor.
Muchas personas, sacadas del sueño ya bastante precario después de más de 2.000 réplicas dle primer terremoto, corrieron hacias las plazas de casas en ruinas y muchas se arrodillaron en dirección del sol que estaba surgiendo en aquel momento.
Con 6,5 grados en la escala de Richter el de esta mañana es el segundo terremoto de intensidad tan alta que se produce en Italia, después del de 1980 en la región de Irpinia, en el sur, que provocó 2.914 muertos y 280.000 personas tuvieron que ser evacuadas. El seísmo de L’Aquila, en el 2009, que provocó 309 muertos, fue de 5,8 grados.
Los bomberos y Protección Civil están realizando una especie de rápido censo para verificar si el terremoto, sentido en toda Italia, desde los Alpes hasta el sur de la bota peninsular.
