Una vez resuelta la cuestión de los nombramientos en la cúpula de la UE, los Veintisiete han abierto la batalla por el reparto de las carteras dentro de la Comisión Europea. España aspira a que Joaquín Almunia repita como comisario de Asuntos Económicos y Monetarios.
Francia quiere que el exministro Michel Barnier obtenga la cartera de Mercado Interior para evitar que vuelva a caer en manos de un ultraliberal y asegurarse de que se impulsará una regulación de los mercados que evite nuevos desmanes. Alemania, que ha designado como su nuevo comisario a Günther Oettinger, presidente del land de Baden-Württemberg, también desea una cartera económica.
El presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, está esperando a que los últimos países que aún no lo han hecho le comuniquen el nombre de su comisario. Grecia anunció ayer la designación de Maria Damanaki, símbolo de la lucha contra la dictadura, con lo que va aumentando el número de mujeres. Barroso intentará pactar durante las dos próximas semanas el reparto de carteras.
