Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea (UE) han llegado esta noche a un compromiso político general sobre los principios básicos de la estructura y funcionamiento del nuevo servicio diplomático europeo, que tendrá por misión defender los intereses económico y políticos de Europa en el mundo y multiplicar la capacidad de influencia europea en la escena internacional.

El nuevo servicio exterior de la UE, una de las innovaciones clave del Tratado de Lisboa, estará formado por unas 130 delegaciones repartidas por todo el mundo, contará con unos 5.000 funcionarios y un presupuesto de unos 30.000 millones de euros para el conjunto del periodo 2010-2013. El nuevo cuerpo diplomático podrá ofrecer atención consular a los ciudadanos europeos en el extranjero, según el compromiso alcanzado.

La ministra europea de Asuntos Exteriores de la UE, Catherine Ashton, reconoció que aún quedan una serie de puntos y detalles por acabar de resolver, como el proceso de nombramiento de los futuros embajadores de la UE.

ESTRUCTURA ORGANIZATIVA

La cúpula del nuevo cuerpo diplomático dirigido por Ashton estará compuesta por un secretario general ejecutivo, dos secretarios generales adjuntos y seis directores generales con areas geográficas y temáticas propias.

Los Veintisiete deben ahora obtener el respaldo del Parlamento Europeo, que se ha mostrado muy crítico con el proyecto de Ashton por considerar que no servirá para defender el interés común europeo, que prima los intereses de los grandes estados y que mantiene fragmentada la política exterior de la UE.

La Comisión Europea también tiene que aprobar los cambios introducidos por los ministros en la propuesta inicial.