Las imágenes de una brutal paliza propinada por soldados británicos a cuatro adolescentes iraquís han reabierto la polémica sobre la intervención del Reino Unido en Irak. El Gobierno de Tony Blair trataba ayer de limitar los daños causados por la agresión a civiles iraquís, consciente del impacto que el vídeo puede tener en el mundo árabe.

El primer ministro aseguró desde Suráfrica que la denuncia "será investigada", pero recalcó que "la gran mayoría" de las tropas británicas en Irak "se comportan de manera apropiada". "Están haciendo un gran trabajo por nuestro país y por todo el mundo", afirmó. El Ministerio de Defensa anunció la apertura de una investigación a cargo de la policía militar. Un portavoz condenó "todos los actos de abuso y brutalidad". The News of the World eligió esa misma palabra, "brutal", escrita en portada con grandes caracteres, para calificar el contenido de lo que describe como "un vídeo casero secreto".

La cinta arranca con disturbios en las calles de Basora, supuestamente a principios del 2004, protagonizados por grupos de jóvenes que lanzan piedras contra soldados británicos a las puertas de un cuartel. En la siguiente escena, varios militares entran en el patio del recinto con cuatro adolescentes a los que propinan puñetazos y patadas y golpes con unas porras.

42 GOLPES EN UN MINUTO Durante un minuto es posible contar 42 golpes. Los chavales piden a gritos que dejen de pegarles, lo que provoca las burlas del cabo que rueda el vídeo, quien anima a sus colegas a seguir."Sí, sí, niños traviesos. Pequeños cabrones, morid", comenta con placer el cabo entre risotadas. Finalmente puede verse a uno de los vapuleados, que queda inerte tendido en el suelo, tras perder aparentemente el conocimiento.

"Hemos consultado con nuestra fuente, con gente relacionada con nuestra fuente, con expertos militares, con el Ministerio de Defensa y con más gente y estamos convencidos de que el documento es absolutamente auténtico", señaló el director adjunto de The News of The World, Stuart Kuttner, quien no quiso revelar cómo había conseguido la grabación. Tampoco se conoce la identidad de los agresores ni el regimiento al que pertenecen.

PREOCUPACION En Basora, el portavoz militar británico Chris Thomas no ocultó su preocupación. "Esperamos que las buenas relaciones que las fuerzas multinacionales han establecido con tanto esfuerzo no se vean afectadas". No es la primera vez que las tropas británicas se ven envueltas en un escándalo así. Tres soldados fueron encarcelados por agresiones en el 2003 a un iraquí cerca de Basora. Y siete paracaidistas acusados de la muerte de un iraquí fueron absueltos por un tribunal marcial en la localidad inglesa de Colchester.