El número de víctimas por el terremoto que este sábado asoló el 80% de Chile se eleva a 708 muertos, ha dicho hoy la presidenta, Michelle Bachgelet.

La mayor parte de las víctimas se produjeron en la región del Maule, con 541; seguida de Bío Bío, con 64, y 103 en las otras seis regiones afectadas, donde además hay dos millones de damnificados.

La normalización del país

El ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, ha calificado el terremoto como "un cataclismo de dimensiones históricas". "Desde el año 1960 --fecha del terremoto de Valdivia, el mayor de la historia, de 9,5 grados Richter-- nunca habíamos tenido un terremoto así", ha dicho Pérez Yoma, quien ha declarado que las autoridades esperan "tener un país más normalizado" en las próximas 48 ó 72 horas.

El sismo de este sábado, de más de 8 grados Richter (8,3 según la Oficina Nacional de Emergencia de Chile y 8,8 según el Instituto Geológico de EEUU), abarcó desde la región de Valparaíso (en el centro del país) hasta la de Los Lagos (al sur), a lo largo de unos 1.000 kilómetros de la geografía chilena.

Una enorme ola o un tsunami

Las regiones más afectadas, según los datos reunidos hasta ahora, son las del Maule, donde se situó el epicentro del sismo, a 300 kilómetros de Santiago y del Bío Bío, a 500 kilómetros de la capital. Entre las víctimas figuran cinco habitantes del archipiélago de Juan Fernández, a unos 600 kilómetros de la costa chilena, donde además 11 personas desaparecieron cuando una enorme ola penetró en el principal poblado de ese territorio insular.

Mientras la Marina descartó que se tratara de un tsunami, Fernández ha considerado que sí lo era, por suponer un comportamiento anormal del mar. "Yo lo denomino tsunami. Ahora, si los técnicos, geofísicos quisieran denominarlo de otro modo, creo que corresponde a otra competencia. Lo importante es que nos ha generado daño en zonas como Juan Fernández, donde el sismo no se percibió", ha dicho la directora de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Carmen Fernández.

Compra de provisiones y gasolina

"Por lo tanto, da lo mismo como se llame", ha añadido la directora de la Onemi, a quien el presidente electo de Chile, Sebastián Piñera, le ha pedido que permanezca en el cargo después del 11 de marzo, fecha del cambio de mando presidencial en el país, con el objeto de enfrentar de mejor manera la situación generada por el terremoto.

El ministro del Interior, por otra parte, ha hecho un llamamiento a la gente a que no compre provisiones o gasolina de manera exagerada, asegurando que el abastecimiento de esos productos está asegurado y no habrá escasez. "Ese problema no lo tenemos", ha asegurado Pérez Yoma, para quien el principal problema a solucionar es reparar las carreteras dañadas para normalizar el tráfico de personas y mercaderías.