José Luis Rodríguez Zapatero propuso ayer convertir las remesas de dinero que los emigrantes envían a sus países de origen en instrumentos de lucha contra la pobreza. Planteó en concreto reducir los costes de envío "para que no se quede tanto dinero en el camino" y facilitar el acceso a microcréditos a los receptores de esos fondos con el fin de que desarrollen iniciativas y empresas.

El presidente lanzó la propuesta en la reunión de alto nivel de la ONU sobre financiación al desarrollo, cita en la que reiteró su voluntad de que España eleve su ayuda al desarrollo hasta el 0,7% del PIB a más tardar en el 2012. Zapatero quiso dejar bien claro que la solidaridad "no es para España sólo una palabra" y anunció que el Gobierno destinará 240 millones de dólares (195 millones de euros) en los próximos 20 años al proyecto de la Alianza Global para Vacunas e Inmunización.

SOBRETASA El jefe del Ejecutivo suscribió además una declaración de la Iniciativa contra el Hambre y la Pobreza --grupo que abanderan España, Francia, Alemania, Brasil y Chile-- en la que se plantea el cobro de una sobretasa en los billetes de avión con el fin de dedicar esos fondos a programas de desarrollo en los países más necesitados. Zapatero aclaró en rueda de prensa que él prefiere centrar su política de ayudas en las remesas y el programa de vacunación. Fuentes oficiales señalaron que el Ministerio de Hacienda considera "inaplicable" en estos momentos una medida semejante en España. El presidente chileno, Ricardo Lagos, anunció casi al mismo tiempo que su Gobierno introducirá en breve un incremento de dos dólares en los billetes internacionales para la lucha contra la pobreza.

El mecanismo que proponen los integrantes de la Iniciativa contra el Hambre consistiría en implantar una aportación "poco costosa" que se deduciría de los pasajes de avión expedidos a pasajeros que despeguen de los países firmantes de la convención. Cada país tendría la facultad de establecer una diferenciación entre pasajes de clase preferente o económica, así como entre vuelos nacionales e internacionales. Francia ha ofrecido organizar en febrero del 2006 una reunión de alto nivel para ultimar los detalles del proyecto.