Las informaciones proporcionadas por algunos colaboradores de Abú Musab al Zarqaui permitieron a las tropas de Estados Unidos localizar y matar al líder de Al Qaeda en Irak, según han explicado fuentes del Ejército norteamericano.Un importante miembro de esta organización terrorista arrestado en Jordania y un infiltrado en la organización pueden ser las principales fuentes de información del Gobierno de EEUU, según informa la cadena norteamericana CNN citando fuentes del Ejército estadounidense. Zarqaui murió en los alrededores de la localidad de Baquba cuando cazas norteamericanos lanzaron dos bombas de 227 kilos cada una contra un conjunto de construcciones en el que, según el presidente norteamericano George W. Bush, la Inteligencia iraquí había identificado la presencia del terrorista. Seguimiento de AbdulrahmánParte de la información parece haber sido aportada por un miembro de la organización terrorista arrestado previamente en Jordania, el pasado 22 de mayo. El resto de los datos podrían haber procedido de los civiles iraquís residentes en Baquba y de las fuerzas especiales norteamericanas, que rastrearon a Abú Abdulrahmán, consejero espiritual del fallecido terrorista jordano. Abdulrahmán "cobró atención a través de la información proporcionada por un colaborador de la red de Zarqaui", según ha afirmado el general norteamericano Bill Caldwell.