"He venido a Pekín a competir, los récords no me preocupan, ya habrá tiempo de pensar en ellos", afirmó Usaín Bolt en la rueda de prensa posterior a su gran victoria en los 100 metros, adornada con una nueva plusmarca universal, 9.69.

El jamaicano cumplió ayer con el trámite de pasar a la final de 200, disputando una semifinal que ganó mirando por debajo del hombro al menudo estadounidense Shawn Crawford, el campeón olímpico del doble hectómetro en Atenas-2004. "Usain no va a batir el récord de Michael Johnson en Pekín porque no tiene nadie que le apriete", afirmaba Ferdinand Johnson, oficial de la Asociación Olímpica de Jamaica. El dominio jamaicano en las pruebas de velocidad le está echando una mano a China en el pulso que mantiene con los Estados Unidos por la supremacía en el medallero.

China, a la cabeza

De momento, China suma 43 oros y su inmediato rival 26. El atletismo es, o era, uno de los viveros de medallas para el equipo de las barras y estrellas, sobre todo en las pruebas de velocidad, vallas y relevos. Pero Bolt y los velocistas jamaicanos están restando triunfos a los americanos.

Justin Gatlin ganó el oro en los 100 metros de Atenas-2004 y tres estadounidenses coparon el podio en 200, con Crawford a la cabeza. Con Gatlin sancionado a perpetuidad y el caso Balco aún coleando, una olimpiada después la velocidad norteamericana cruza el desierto, con un único oasis en los 400 metros que dominan claramente James Wariner y Lasahwn Merrit.

Como las desgracias nunca vienen solas, la lesión de Tyson Gay y la explosión de Usain Bolt, han quitado el poco protagonismo que le quedaba a los esprínters estadounidenses. "Jamaica es un país pequeño, pero tiene una gran tradición en la velocidad y nuestros triunfos no deberían sorprender", concluye, sonriente, el directivo caribeño.