Diego Armando Maradona, el gran astro del fútbol, el hombre de 'La Mano de Dios', aquel gol inolvidable a Inglaterra en el Mundial de Mexico'86, lo pasó en grande viendo como la selección albiceleste de 'la pelota gorda' cerraba la primera fase olímpica ante Rusia y Luis Scola anotaba la friolera de 37 puntos, tope realizador individual del campeonato hasta ahora.

El mítico 'Dieguito' presenció la toma de contacto de sus compatriotas de la canasta con los rusos en forma de ensayo general para medirse en los cuartos, el próximo miércoles, a un equipo de corte europeo, igual que el rival que espera a los hombres de Sergio Hernández en los cruces: Grecia. Le acompañaron el secretario general de la FIBA, el suizo Patrick Baumann, y el director de comunicación de la Federación Internacional, el español Marcos Beltrá, en el palco de personalidades, desde donde presenció las evoluciones del equipo de Sergio 'Oveja' Hernández.

El sexagésimo encuentro de la primera ronda del torneo masculino de Pekín puso frente a frente a dos equipos de futuros opuestos. A la formación albiceleste, actual campeona olímpica, le aguarda Grecia. A Rusia, a la campeona de Europa, no le han ido bien las cosas en la capital oriental. Pero, precisamente porque los suramericanos continúan en competición, y además defienden el primer escalón del podio, y los ex soviéticos dejan el torneo, puede decirse que contra pronóstico y de forma inesperada, el mayor interés en decantar el choque de forma positiva vino de parte de los hombres de David Blatt, cuyo inicio otra vez sembró el desaliento (19-12 m.8).

A los rusos les ha salido un mal torneo. Han competido en un grupo endiablado, no han cogido la onda a la refriega olímpica y, en un torneo en el que prácticamente no hay margen de error, les ha podido la presión en la misma medida que el potencial de los rivales. Sin embargo, son un conjunto con orgullo. Y Argentina una selección consciente de la importancia que entraña lo que tiene por delante y, en vez de renunciar al combate para ahorrar energías, lo encaró con la mente puesta en todas las dificultades que con toda seguridad encontrará ante los griegos. Argentina está preparada. Scola por las nubes.