Aunque la fecha de la boda sigue bajo secreto sumarial, Letizia Ortiz, prometida del príncipe Felipe, sí ha revelado el nombre que estudian para su futuro hijo. "El de Pelayo --el caudillo astur que inició la reconquista al ganar la batalla de Covadonga-- es un nombre que nos encanta a los dos y lo barajamos, pero aún es pronto. Todo se andará", afirmaba ayer la periodista en Abc. Letizia, que tras el anuncio del compromiso contestaba directamente al móvil, mantuvo con el diario madrileño una insólita entrevista telefónica en la que hizo balance de estos días.
En una sola semana, Letizia ha protagonizado un comunicado de boda real, una presentación ante la prensa y una petición de mano. ¿Primeras conclusiones? "Me abruma saber que se fijan en todo lo que hago, en lo que digo y en cómo lo digo", asegura la futura Princesa de Asturias. Sintiéndose en el ojo del huracán, afirma que quiere mantenerse "al margen de la vorágine". "Hasta ahora he sido consciente de todo lo que me está pasando porque ha sido una decisión meditada y fruto del amor que nos profesamos", añade.
ENCUENTRO DISTENDIDO
De la petición de mano, Letizia afirma que "fue un día emocionante para toda la familia". Según explica, el encuentro de sus padres con los Reyes se produjo en un ambiente relajado, dentro de las normas. "Aunque me gustaría poder hablar con todo el mundo, no puedo entrar en detalles".
La prometida del Príncipe, que agradeció la hospitalidad de los Reyes tras instalarse en el ala de invitados de la Zarzuela, insiste en su deseo de visitar "pronto" Asturias: "Tengo ganas de sentirla, de pasearla y de saludar y ver cómo me miran". En cuanto a los comentarios que ha suscitado, zanjó: "Lo que dicen es bueno, ¿no?".
