El alcalde, Pedro Acedo, tachó ayer de "envidioso" al presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, por lo que, a su juicio, el equipo de Gobierno municipal está haciendo en la ciudad, y por eso trata de "fastidiar" al ayuntamiento, aseguró, en referencia a la denuncia por las obras en la calle Almendralejo.

Acedo manifestó tras conocer el pronunciamiento del Juzgado de los Contencioso-Administrativo, que permite seguir con las obras, que "Ibarra está lleno de envidia por lo que se está haciendo en Mérida; sólo tiene ganas de fastidiar, y ese es el fondo real de este asunto, el deseo de paralizar la ciudad, modificando el Plan General de Ordenación urbana y no cuidando los restos", aseguró.

Esta intención, en su criterio, se debe a que el presidente de la Junta, al que tachó de "señorito", está molesto porque "no se le ha puesto un aparcamiento en la puerta de su casa, cuando tiene uno privado dentro, le hemos preparado la Avenida de José Fernández López y le hemos arreglado el lugar donde de vez en cuando va a trabajar, la plaza del Rastro".