El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) va a invertir más de un millón de euros en la renovación de 12,8 kilómetros de vía entre Aljucén y El Carrascalejo para asegurar la conexión de Mérida a la línea de alta velocidad a partir del 2019. Se trata del tramo que se usará de alternativa al by-pass de acceso a la nueva estación del AVE, cuya construcción se ha visto retrasada por discrepancias con las empresas contratistas y por tanto, se incorporará a la red «con posterioridad».
Los trabajos se han adjudicado la empresa Construcciones y Promociones (Coprosa) por un presupuesto total de 1.158.506 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses. La obra consiste en mejorar la superestructura de la vía con la sustitución de carril y traviesas, manteniendo en mismo ancho y el trazado. Se actuará en el trayecto comprendido entre Aljucén (punto kilométrico 4/000) y el antiguo apeadero de El Carrascalejo (punto kilométrico 16/800), correspondiente a la línea Aljucén-Cáceres, según explicó ayer Adif.
Una vez renovado este tramo, se podrá enlazar la plataforma de alta velocidad con Mérida. El objetivo de la actuación es adecuar la superestructura existente al futuro tráfico de la línea para conseguir velocidades mayores y reducir los tiempos en los recorridos en tanto se construye el nuevo by-pass que dará acceso a la capital extremeña. De esta forma, «se incrementa el confort y la fiabilidad».
La renovación de este tramo de vía convencional fue uno de los compromisos adquiridos por el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, en su visita a la región el pasado 18 de septiembre. La actuación, que se financiará con cargo al fondo Feder de la UE, se hace necesaria debido al retraso que acumula la construcción del by-pass de acceso a la nueva estación, cerca de Esparragalejo.
RETRASO / El by-pass comprende los tramos San Rafael-Cuarto de la Jara y Cuarto de la Jara-Arroyo de la Albuera, que en estos momentos tienen paralizada su construcción debido a las discrepancias con las empresas contratistas: ambos fueron adjudicados en 2014 con rebajas de más del 50% sobre el tipo de licitación, lo que después hizo inviable su ejecución. Tras rescindir el contrato con las constructoras, Fomento está trabajando en la redacción de nuevos proyectos para volver a sacar ambas obras a licitación pública.
No obstante, el retraso acumulado impedirá ya su finalización en 2019, que es cuando el ministerio tiene previsto terminar el corredor Badajoz-Plasencia, de ahí que se haya hecho necesario buscar una alternativa.
