La Asociación de Fibromialgia y Fatiga Crónica de Mérida (AfibroMérida) reclamó ayer una atención médica personalizada y la creación de una unidad multidisciplinar que asista a las 26.000 personas que sufren esta enfermedad en Extremadura, al tiempo que alerta sobre «la regresión» del sistema público sanitario en el reconocimiento de estas patologías.

En un comunicado con motivo del Día Internacional de la Fibromialgia, que se celebra mañana, el colectivo ha denunciado la última guía del sistema sanitario, dirigida a los médicos de Atención Primaria, en la que se asocia a la fibromialgia y el síndrome de fatiga crónica, la sensibilidad química múltiple y la electrosensibilidad a «trastornos somatomorfos».

Por ello, mañana AfibroMérida saldrá a la calle para informar y visibilizar esta patología que cree «estigmatizada socialmente», y denunciar la incomprensión del sistema sanitario público. Según AfibroMérida, relacionar la fibromialgia y el síndrome de fatiga crónica con enfermedades piquiátricas implica situarlas en «el cajón de sastre de etiologías diversas que pueden crear confusión a los profesionales clínicos y especialmente a los evaluadores, así como desasosiego a los enfermos».

Además, esta guía no incluye los últimos estudios y experiencias realizadas y reconocidas internacionalmente.