Todos tosen. Y la gripe haciendo estragos. Las cigüeñas vuelan por el cielo de la ciudad. Aconsejamos que se den una vuelta por la carretera de Alange y vean la colonia que se encuentra a pocos kilómetros de Mérida.

Los carnavales llegaron a su fin y, una vez más, se ha demostrado que la ciudad no se integra en esta festividad como lo hacen las comparsas y familiares. Pero hay que hacer un examen de conciencia y analizar las causas.

El presidente del Carnaval Romano, Andrés Madrigal, y la concejala de Festejos, Begoña Sausol, comentaban en una entrevista que les hizo en Emérita Televisión Paco Báez, el divorcio entre la población y el propio carnaval. Una sana envidia al recordar los carnavales que se celebran en Badajoz, donde la participación es masiva, y como decía Begoña, todos se ponen una máscara o un sombrero con un vieja bufanda, pero todos salen a la calle a disfrutar de su carnaval.

Estoy convencido de que el carnaval de Badajoz, en participación ciudadana y por el número de habitantes, es el mejor de España. Después hay otros con mayor fama, como el de Cádiz, donde las murgas, chirigotas, comparsas y estudiantinas dan un tono único en los lugares donde actúan. O el carnaval de Tenerife, que hace gala de un lujo fuera de toda posibilidad casera, como no sea con la aportación de las casas comerciales y la propia televisión al retransmitir sus actos.

Andrés Madrigal desea tratar el tema entre los carnavaleros e implicar en sucesivos ediciones a la población emeritense, que en los primeros años se volcó y su participación fue masiva.