La Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mérida y Comarca (Apyme) propone que si la Gerencia del Catastro no culmina la revisión de los nuevos valores catastrales antes del mes de abril, fecha en la que las listas del padrón son definitivas, se emitan los recibos del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) del año pasado, o bien se elabore un recibo complementario.

Con esta propuesta el presidente del colectivo, Manuel Balastegui, espera que los ciudadanos afectados por los errores de la ponencia de la actualización catastral no se vean perjudicados en el pago de otros tributos que toman este gravamen como referencia.

Además del IBI, afecta al impuesto que se aplica a las donaciones y sucesiones, al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, el Impuesto sobre el Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (Plusvalía), y el Impuesto sobre el incremento no justificado en la venta de Bienes Inmuebles o Ganancias Patrimoniales.

Balastegui sostiene además que existe un "ocultismo intencionado" por parte del ayuntamiento en lo que respecta a las zonas en las que se ha rectificado o modificado el valor de los inmuebles, en cuanto a que no informa sobre las reuniones con la Gerencia del Catastro.