El centro asociado de la UNED en Mérida celebró ayer el acto de apertura del nuevo curso académico. Su directora, Beatriz Badorrey, destacó que el centro emeritense «es muy emblemático por muchas razones» como su antigüedad de más de 40 años, su ubicación en la capital extremeña y su «trayectoria brillante». Badorrey, que accedió al cargo recientemente tras la salida de su antecesora Irene Mañas, reconoce que ser directora «es un reto fascinante». El centro cuenta para el nuevo curso académico con casi 2.000 alumnos inscritos.