La instalación de sistemas de alarma se ha disparado en Mérida en los últimos días tras los recientes robos que de manera seguida han tenido lugar en varias viviendas. Esa mayor preocupación la notan sobre todo las empresas de seguridad. José María Colomo es el responsable de Seci Seguridad, una firma con años de experiencia en el sector. A su juicio, esa inseguridad ciudadana es cada vez más patente y tras estos últimos robos "no hay miedo, yo diría que hay hasta pánico", comenta.

Su empresa está instalando ya las últimas tecnologías en vigilancia de viviendas, con cámaras de seguridad que graban todo en un disco duro de ordenador que se puede ver por internet, y que por apenas 1.500 euros garantiza la seguridad en el hogar.

EN LAS NUEVAS CASAS Además, trabaja con constructores para que las casas nuevas incorporen ya sistemas de alarma, un servicio que demandan también los ciudadanos, asegura, porque "quienes se gastan más de 40 millones de pesetas en una casa lo que quiere es que lleven todos los servicios incorporados". En este sentido, anunció que habrá casi un centenar de viviendas de las que se están haciendo en la zona de La Corchera que incorporarán alarmas. Según dijo, "por apenas un uno por ciento más en el precio del piso o casa se puede montar un sistema de seguridad en condiciones".

Pero aclara que tampoco hace falta desembolsar mucho dinero para tener un buen sistema de seguridad en el hogar. Por 440 euros se pueden poner alarmas conectadas con la central operativa de la policía.

Al margen de las medidas técnicas para garantizar la seguridad, Colomo insiste en que el problema es la falta de efectivos policiales, ya que, según sus estimaciones, hay un déficit de más de 90 agentes, a lo que hay que añadir, resalta, que la población crece, aunque sin querer vincular la inmigración con los robos.

En cualquier caso, la instalación de sistemas de seguridad en las viviendas se ha incrementado de manera considerable en los últimos años. En la actualidad, la gran mayoría de las viviendas unifamiliares de nueva construcción tienen instalado un sistema de seguridad para evitar robos, una medida que afecta prácticamente a la totalidad de locales comerciales de la ciudad. Sin embargo, hace apenas diez años, solo el 30% de los hogares contaban con estas medidas.

OLEADA DE HURTOS Lo cierto es que en un plazo de cinco días se han producido robos en dos chalets e intento de hurto en otros dos. Dos chalets de la zona de la avenida de Portugal fueron asaltados durante la madrugada del pasado 10 de enero con sus propietarios durmiendo en el interior. Además, intentaron acceder a otro en la calle Luis Vaz de Camoes, casi pegado a los otros dos. En los que robaron, las alarmas las han colocado después de los hechos.

Donde la alarma de la casa sí evitó el robo fue en un chalet de la calle Celemín, cerca de la avenida de la Plata. El 15 de enero una persona que había entrado por la cochera huyó nada más saltar el sistema de seguridad.