Han pasado dos meses desde que la constructora Dragados finalizara las obras del aparcamiento de San Lázaro. Sin embargo, y a pesar de que está todo listo para su funcionamiento, aún no ha abierto sus puertas. El Ayuntamiento de Mérida exige a la empresa Iridium, encargada de la explotación del recinto, que abra las instalaciones sin más demora, puesto que ya cuenta con todos los permisos para el desarrollo de la actividad. Lo cierto es que tiene licencia de apertura desde hace más de un mes, pero las instalaciones y la plaza pública de la superficie, que ha sido completamente renovada, continúan cerradas.

La empresa había solicitado al ayuntamiento una revisión de las tarifas acordadas en los pliegos de condiciones del concurso convocado para la construcción y explotación del aparcamiento. La delegada de Urbanismo, Raquel Bravo, ha señalado a este diario que el consistorio va a exigir una vez más a la empresa que cumpla el contrato y que incie su actividad.

Este aparcamiento público cuenta con 320 plazas divididas en dos plantas. Se ubica en la plaza central de la barriada de San Lázaro. Está, por tanto, frente al nuevo Palacio de Justicia y la Comisaría de Policía, y a escasos metros de la Consejería de Fomento. No obstante, no alcanzará su máximo rendimiento en cuanto a la demanda de usuarios hasta que se produzca el traslado de las consejerías de la Junta que tienen previsto instalarse en el nuevo edificio construido en el Tercer Milenio, junto a las citadas dependencias administrativas, que está actualmente en construcción.