El convento de las Freylas, un edificio religioso del siglo XVI adosado a la basílica de Santa Eulalia, es desde la semana pasada propiedad del ayuntamiento tras la firma del contrato de adquisición por el alcalde, Angel Calle.

La compra, por 1,8 millones de euros, ha sido posible tras lograr un acuerdo con los antiguos propietarios para que el pago se efectúe de manera fraccionada.

En cuanto al futuro de este monumento, el ayuntamiento ha enviado un informe a la Consejería de la Cultura con sugerencias sobre la utilidad que se le debería dar a este espacio. La principal idea es convertir este recinto en un centro de estudios eulalienses en torno a la figura de la mártir y de la época tardoantigua y visigoda, según manifestó el alcalde Angel Calle.

También se quiere destinar este espacio a la organización de congresos, seminarios y jornadas en torno a estos asuntos.

ELECCIONES La adquisición del convento de las Freylas fue acordada por el anterior equipo de gobierno tres semanas antes de las elecciones. No se llegó a hacer ningún pago y tampoco se consigno en los presupuestos municipales, sólo había un compromiso con los propietarios a los que se les dio una señal.

El edificio tiene una superficie construida de 2.812 metros cuadrados, de un total de 4.267 metros cuadrados.