Unanimidad plenaria para mejorar la accesibilidad en la ciudad. La proposición presentada por el PP local para solicitar la implantación de un plan plurianual de accesibilidad salió ayer adelante con el apoyo de todos los grupos de la corporación. A ello se sumó el anuncio efectuado por el alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, quien aseguró que este plan contará con una partida de 225.000 euros en el borrador de los nuevos presupuestos.

La edil popular Ana Blanco destacó la necesidad de poner en marcha este plan para desarrollar medidas que mejoren «aspectos relacionados con el entorno y la vía pública, al entender que son prioritarios». En su defensa de la proposición, Blanco señaló que existe una ley autonómica en la que se regula que las administraciones locales destinen una partida específica a este plan dentro de los presupuestos. «Entendíamos que este plan era importante no solo para la ciudad, sino para los beneficiarios», subrayó.

Por el momento no se han especificado cuáles serán las intervenciones que se lleven a cabo, no obstante, Blanco argumentó que se trata de adecuar los espacios físicos de la vía pública para facilitar el tránsito de los ciudadanos. Por su parte, la delegada de Atención a la Discapacidad, Silvia Fernández, preguntó a los populares si acababan de conocer la ley de accesibilidad, al tiempo que enumeró las actuaciones vinculadas con la materia que ya ha desarrollado el Equipo de Gobierno.

Cabe señalar que Mérida Participa, Izquierda Unida y el edil no adscrito Juan Luis Lara expresaron su conformidad con la proposición al entender que iba en aras de la accesibilidad y, por lo tanto, beneficiaba a los ciudadanos.

polémica por 100 euros // Como los presupuestos de 2017 no se han aprobado y están prorrogados los del pasado año, ayer se llevó a pleno la ampliación en 8.100 euros de una subvención nominativa a la Junta de Cofradías. La portavoz de Hacienda, Carmen Yáñez, informó de que en el presupuesto de 2016 se había aprobado una subvención de 42.000 euros que se pretendía aumentar para «reforzar esta festividad» que busca ser declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional.

El grupo popular, que anteriormente había presentado una proposición para ampliar esta cuantía en 8.000 euros, criticó que el Gobierno local hubiese añadido 100 euros más para «quedar por encima». El edil popular Fernando Molina rechazó «las formas» aunque su grupo apoyó esta ampliación. Por su parte, tanto Mérida Participa como IU se abstuvieron y coincidieron en criticar que el Equipo de Gobierno hubiese subido la cuantía en 100 euros por considerar que se actuaba «de manera infantil» y que la proposición no era «una subasta».