Cinco animales de compañía de las especies felina, canina y de otros micromamíferos. Es el máximo fijado en la ordenanza reguladora de la tenencia de animales en domicilios y solares de Mérida, aprobada la semana pasada por unanimidad en el pleno del ayuntamiento y que entrará en vigor en breve, una vez se publique en el Boletín Oficial de la Provincia de Badajoz.

La nueva normativa prohíbe además la tenencia de especies de granja en el casco urbano y define todos los aspectos relacionados con la tenencia de cualquier tipo de animal (doméstico, de explotación, silvestre o exótico...). "La anterior solo se refería a los perros, y para los demás animales había que remitirse a la normativa regional y estatal, pero hemos preferido aclarar este tema a nivel municipal, para dar una mejor respuesta a los ciudadanos", explica Francisco Miranda, delegado del Centro Zoosanitario

La ordenanza de tenencia de animales regula con detalle todos los aspectos relacionados con la tenencia de cualquier tipo de especies. En algunos casos, se extiende lo que ya estaba previsto para los perros --como, por ejemplo, la prohibición de dejarlos en terrazas o espacios abiertos desde las 23.00 a las 8 horas-- a todo tipo de "animales domésticos que con sus sonidos perturben el descanso de los vecinos".

En otros, se introducen novedades como la limitación de cinco animales en viviendas y solares en suelo urbano. En esta circunstancia, se plantea como excepción la autorización municipal, siempre que se justifique "por medio de documento consensuado con los vecinos", aparte de que se excluyen las camadas de animales en época de cría. "Intentamos anticipar todas las opciones, para que la norma sea lo más completa posible", apunta Miranda.

SANCIONES Otra de las principales novedades es que se prohíbe expresamente la tenencia de animales domésticos de explotación (aves de corral, ganado ovino, bovino...) en viviendas y solares localizados en suelo urbano. Solo este año, el ayuntamiento ha recibido seis denuncias relacionadas con este tema, según informó hace un mes. Estos problemas deberían tener ahora una más rápida resolución, con la entrada en vigor de esta ordenanza, que prevé sancionar con hasta 750 euros la tenencia de este tipo de especies dentro del casco urbano (infracción leve) y de hasta 1.500 (infracción grave) o 3.000 (muy grave), si la incorrecta práctica se reitera.