La portavoz municipal y concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Mérida, Estrella Gordillo, afirma que al equipo de gobierno no le va a "temblar la mano" en "cerrar" la fábrica Extremeña de Grasas en la ciudad "si sigue emitiendo malos olores", si bien asegura que no les consta denuncia, aunque la concejala de Medio Ambiente, Marisa Tena, advierte de la conveniencia de presentar denuncias formales en la Policía Local ante los últimos olores detectados

Según la agencia Europa Press, la portavoz municipal recuerda que a los propietarios de esta empresa se les ha concedido la calificación urbanística solicitada para la construcción de una nueva fábrica que estaría situada en la zona sur de la ciudad, "por la carretera de Sevilla, pasando Torremejía, pero en término municipal de Mérida".

Según Marisa Tena, Extremeña de Grasas tiene la Autorización Ambiental Integrada de la Junta de Extremadura para dicho espacio, pero "no se le va a conceder" para el terreno que ocupa actualmente, de manera que la empresa tiene que proceder "de manera inmediata" al traslado una vez termine todo el trámite administrativo, que "no solamente depende del tema ambiental", sino también de "la gestión urbanística y de construcción".

Al respecto, asegura que el consistorio lleva un seguimiento y "no" ha recibido denuncias sobre malos olores, mientras que anteriormente las recibía "de manera frecuente". De esta manera ha añadido que "el problema" reside en que el ayuntamiento "no" controla los plazos porque las autorizaciones son de carácter regional.