Tras permanecer casi dos años cerrada, la cafetería restaurante del hospital volvió ayer a abrir sus puertas.

La cafetería fue cerrada tras un conflicto laboral entre los trabajadores y los antiguos concesionarios. Posteriormente, el Servicio Extremeño de Salud sacó a concurso la concesión de ese servicio, que fue adjudicado en agosto a la empresa Dehesa Los Bodegones, una franquicia de la cadena Santa María.

EDIFICIO La ubicación de la cafetería es provisional. Cuando finalicen las obras se trasladarán al edificio de nueva planta anexo al hospital. En este lugar habrá una única cafetería que podrán utilizar tanto los trabajadores del hospital como el público en general.

Unos de los propietarios de la cafetería, Pedro Molina, indicó que la cafetería era un servicio necesario para un colectivo de unas 1.000 personas diarias, que tenían que salir del recinto hospitalario, "ahora es un servicio más cercano y económico".

No obstante, durante este tiempo se han abierto tres cafeterías nuevas y un restaurante en los alrededores de la residencia.

El Servicio Extremeño de Salud adjudicó los servicios de la cafetería a Dehesa Los Bodegones por un importe de 18.000 euros. La concesión es por dos años renovables a otros dos.