CCOO denunció ayer que los efectos de los 28 despidos ejecutados por el Ayuntamiento de Mérida el pasado martes ya se dejan notar en los servicios que recibe la ciudadanía, desmintiendo a Leonor Nogales, delegada de Personal, que el día anterior aseguró que la función de esos empleados sería asumida por otros de la plantilla tras una reorganización, sin perjuicio para los ciudadanos. Además, IU solicitó documentación sobre estos ceses, de cuya legalidad duda esta formación, mientras el alcalde, Pedro Acedo, volvió a insistir en la necesidad de recortar el gasto en personal por el déficit del consistorio.

CCOO advirtió que ya desde ayer se están cancelando entrevistas a usuarios de los servicios sociales de base que hasta ahora eran atendidos por trabajadores despedidos, sin que se les informe de cuándo se volverá a contactar con ellos. Además, indica que las oficinas de turismo han dejado abrir a mediodía --una trabajadora confirmó el cambio en el punto de atención cercano al Teatro Romano, aunque no en el de Santa Eulalia--, así como que la del Museo Abierto de Mérida ha pasado a contar con personal no especializado.

Por su parte, IU informó de que ha solicitado a la delegación de personal una copia de la documentación y los informes técnicos del procedimiento administrativo que ha derivado en 28 despidos de trabajadores municipales. La formación asegura que esta decisión precisa de una serie de actuaciones administrativas e informes para adecuarse a la legalidad, mientras que hasta ahora ningún grupo de la oposición ha recibido información sobre este tema. Además, denuncia que el gobierno local miente al calificar de "temporales" a los trabajadores despedidos, cuando estos, pese a no tener la categoría de laborales fijos, habían alcanzado la condición de indefinidos por su permanencia en el consistorio.

RESPUESTA MUNICIPAL El alcalde, Pedro Acedo, insistió una vez más en la necesidad de esta medida para recortar el capítulo de personal por la situación de las arcas municipales. "Nos se pueden pagar todas esas nóminas", aseguró en la misma línea en que se pronunció Nogales el día previo. "El consistorio tenía 70 millones en ingresos y ahora tiene 44", respondió Acedo preguntado por el rechazo de IU a los despidos, añadiendo que la administración local emeritense es la que tiene más trabajadores de Extremadura y que ciudades como Avila, también Patrimonio de la Humanidad y de 62.000 habitantes (4.000 más que Mérida), tienen menos trabajadores (545).

En cuanto a la opción de despidos, Acedo, también en el mismo sentido que Nogales, señaló que "ojalá no fueran necesarios", pero no los descartó totalmente. Además, apostilló que cualquier parado de la ciudad tiene el mismo derecho que los trabajadores ahora despedidos a acceder a un puesto de trabajo en el consistorio emeritense.