Los vehículos que circulaban ayer desde primera hora de la tarde por las principales arterias de la ciudad veían como los semáforos no funcionaban, aunque, por fortuna, no hubo que lamentar accidentes.

Las averías se produjeron sobre todo en la avenida de Extremadura y en el cruce de La Torre, donde se concentran una decena de postes semafóricos. Agentes de policía local y operarios encargados de estas funciones se afanaron durante varias horas por arreglar unos semáforos que, por otro lado, se estropean con cierta asiduidad en esta zona.

Las señales luminosas suelen averiarse en días de tormenta o de mucho calor, como el caso de ayer, y en algunas ocasiones permanecen sin funcionar durante varios días.