Los alumnos del ciclo de Realización de Proyectos Audiovisuales y Espectáculos del Instituto Extremadura de Mérida exhibieron el pasado viernes, en el centro cultural Alcazaba de la ciudad, algunos de los trabajos realizados por los estudiantes del ciclo durante su segundo año de formación, así como creaciones de directores amateurs procedentes de diferentes puntos de la región. La segunda edición del festival Claqueta Emérita volvió a tener muy buena acogida, con la asistencia al evento de numeroso público que pudo disfrutar de una gala bien estructurada, dinámica y entretenida, que un año más consiguió captar el interés de la ciudadanía.
El instituto emeritense decidió el pasado año poner en marcha este festival con la idea de promover los proyectos audiovisuales de los alumnos del ciclo, al tiempo que se convierte en una apuesta por la disciplina artística de la danza como elemento artístico del que valerse a la hora de desarrollar este espectáculo. Así, la gala contó este año con la colaboración de la escuela de danza y yoga Wabi Sabi, que puso sobre el escenario del centro cultural Alcazaba dos números de baile. En esta ocasión, el festival ha abierto sus miras incluyendo la proyección de trabajos realizados por jóvenes directores extremeños que no estudian el ciclo en el instituto, ya que lo que se persigue es fomentar en mayor medida el mundo audiovisual extendiendo esta iniciativa a los creadores amateurs de la región. «La idea final es que se convierta en un festival en el que puedan participar todos los jóvenes extremeños», destaca María José, profesora del instituto emeritense,
Diversos formatos
En el transcurso del certamen audiovisual se proyectaron un total de cuatro cortometrajes realizados por creadores ajenos al centro: Future pizza, Los creadores, No es nuestra guerra y El reflejo de todas. La gala concluyó con el visionado de los dos trabajos realizados por los estudiantes del ciclo: el cortometraje La casa de muñecas y el mediometraje Parafernalia. Una de las novedades de esta edición fue la inclusión de un mediometraje, al tratarse de un formato que «es más difícil» de que se proyecte en los festivales y tiene menos difusión.
A nivel regional, el Ciclo de Realización de Proyectos Audiovisuales y Espectáculos solo se imparte en la ciudad. Gracias al buen hacer del profesorado y alumnado, este festival audiovisual de creadores amateurs es pionero en Mérida y ha contado con el apoyo del ayuntamiento y de la Junta de Extremadura.
Cabe destacar que, a través de esta iniciativa, los alumnos pueden poner en práctica los conocimientos que han adquirido durante su formación en un entorno s¡milar al que se van a encontrar cuando salgan al mercado laboral. Por ello, seguirán luchando por este proyecto cultural que ayudará a cambiar la percepción de cómo los jóvenes pueden aportar en el sector audiovisual, en el que es muy difícil hacerse un hueco.
