Los trabajos con una máquina especializada en escanear terrenos para conocer si en la zona junto al cementerio hay o no una fosa común con restos de fusilados en la guerra civil comenzaron ayer junto al camposanto. Luis Lavial, técnico y propietario del georadar con el que se realiza este sondeo, inició el escáner en la franja situada entre la pared del cementerio y las obras del jardín botánico, y las primeras hipótesis apuntan a que hay una fosa común, según fuentes de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Mérida y Comarca.

El análisis seguirá hoy y, en cualquier caso, los resultados finales no se sabrán hasta pasados unos días, una vez cotejados los datos, que permitirán conocer las dimensiones de la fosa y los cuerpos que podría haber.