Siete años después, el edificio que albergaba la antigua comisaría de la Policía Nacional vuelve a tener vida. La Diputación de Badajoz ha comenzado ya las obras para la adecuación del inmueble, que albergará la nueva sede del Organismo Autónomo de Recaudación (OAR) y las oficinas de la institución provincial en Mérida. Los trabajos han sido adjudicados a la empresa Promociones y Servicios Injupe por un total de 582.305 euros y el plazo de ejecución es de nueve meses, tal y como puede leerse en la placa que ya luce en una de las fachadas del edificio situado en la calle Almendralejo.

La antigua comisaría está catalogada en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en el Nivel I de Protección, por lo que cualquier intervención deberá de ser aprobada por los organismos de gestión del patrimonio de la ciudad. Por ello, al mismo tiempo que se inician los trabajos en la primera planta, el Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida realizará las catas arqueológicas correspondientes.

La intervención que se va a llevar a cabo consistirá en adecuar el edificio para albergar las instalaciones de las oficinas de la Comarcal con los «pertinentes elementos», como ascensor, aseos y recorridos, que permitan «el cumplimiento de la normativa de accesibilidad». En esta línea, se realizarán instalaciones nuevas en cuanto a la climatización, alumbrado, fontanería y saneamiento. El programa de necesidades a desarrollar en el proyecto contempla una serie de estancias a habilitar en los tres niveles en que se distribuye el edificio con un superficie total de 862,14 metros cuadrados.

TRES PLANTAS / En la primera planta se ubicarán las dependencias del centro Comarcal para los trabajadores del organismo que actualmente se encuentran en un inmueble alquilado de la calle Morería. Las nuevas oficinas del OAR estarán en la planta baja y se accederá a ellas desde la calle Almendralejo. Por último, en el nivel inferior se habilitará un salón de actos y salas de reuniones para el funcionamiento ordinario de la institución provincial, que con este proyecto aunará sus servicios en un único edificio.

Cabe destacar que tras el traslado de la Policía Nacional al Tercer Milenio en 2011, este inmueble ha permanecido cerrado. En 2014 el Ministerio del Interior lo puso a la venta, después de ofrecérselo al ayuntamiento y que este declinara adquirirlo. La idea era sacarlo a subasta por 420.338 euros y finalmente será la diputación quien le dé nuevo uso.