La empresa Gasmer ha completado la infraestructura de la canalización del gas natural en Mérida. Además, todas las urbanizaciones que se están construyendo cuentan ya con estas instalaciones.

Así lo afirmó ayer el empresario Roberto Vázquez, quien aseguró que Mérida está completamente gasificada, "puede haber alguna excepción, y si hay sitios donde no hemos llegado es porque no se podía". Gasmer espera alcanzar los 3.000 abonados a final de año.

En este sentido, indicó que Mérida cuenta también con una red de gas licuado y que todavía se siguen haciendo obras para su canalización, "algo incomprensible, porque el gas licuado es más caro que el natural. El montaje puede resultar más barato, pero a la larga sale más caro", indicó.

Hasta ahora las inversiones realizadas en la canalización del gas natural alcanzan los dos millones de euros, la misma cifra que se va a invertir para llevar esta energía a las nuevas urbanizaciones. "Siempre hay que estar invirtiendo mientras sea un producto de primera necesidad. Ahora se avecina un cierto parón en la construcción de urbanizaciones, pero luego sube otra vez", indicó.

También afirmó que no cree que la crisis laboral de Respol Butano, que prevé el cierre de la planta de Mérida, afecte al abastecimiento de gas licuado. "La ciudad no va a quedar desabastecida y Repsol Butano no va a dejar de vender bombonas porque se cierre la factoría", señaló.