El ayuntamiento aprobó ayer la adhesión a un convenio con la ONCE para programas de accesibilidad. Supondrá que dotará de accesibilidad a los edificios municipales y activar un plan para eliminar barreras arquitectónicas del centro histórico de la ciudad. Todo ello por un presupuesto total de 88.560 euros, de los que el consistorio aportará 33.560 euros.

Esta iniciativa, aprobada ayer por la junta local de gobierno, se suma a la anunciada el pasado año, relativa a la puesta en marcha, a lo largo de la legislatura, de un plan de atención integral a personas con discapacidad. Para ello, retomará el aprobado en el año 1991 y que nunca se ha llevado a efecto, según el equipo de gobierno.

Las personas con alguna discapacidad física consideran que Mérida es una ciudad accesible en líneas generales, aunque todavía se deben eliminar algunas barreras arquitectónicas, según ha apuntado en más de una ocasión la institución Cermi, que agrupa al colectivo de personas con discapacidad en la comunidad autónoma.

Por otro lado, también dio el visto bueno a la creación del registro municipal de demandantes de las cien naves industriales de 200 metros cuadrados a un precio tasado de 60.000 euros.

Asimismo, aprobó el proyecto de urbanización del SGRV-3 del Albarregas, para modificar las cotas y adaptarlo al vial.

Otro de los acuerdos de ayer fue el de declarar desierto el concurso para la cesión en uso de una parcela para el centro de alzheimer. Por ello, se iniciará el procedimiento negociado sin publicidad.

Al margen de estos asuntos, la junta local de gobierno ha adjudicado a Musical Events la organización del concierto de Los delinquentes del día 2 de mayo.