El Ayuntamiento de Mérida ha dado el visto bueno al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) respecto al impacto medioambiental del trazado del proyecto básico del AVE Madrid-Extremadura a su paso por la ciudad. Este organismo había solicitado un informe al consistorio sobre si había caminos, yacimientos, edificios u otros bienes afectados por las futuras obras. Según informó ayer el ayuntamiento, se ha comprobado que "las pendientes y trazado se adaptan a lo señalado en el estudio informativo previo".

La Delegación de Agricultura y Medio Ambiente, junto a la de Urbanismo, según apuntó ayer la portavoz del gobierno municipal, María Ascensión Murillo, ha respondido que "el estudio del proyecto sigue adelante", porque "no resulta afectado ningún camino vecinal ni restos, yacimientos y construcciones protegidas en el medio rural".

El equipo de gobierno ha manifestado en más de una ocasión que la ubicación de la estación del AVE en las inmediaciones del recinto ferial es la idónea, porque cumpliría el deseo de tener una estación cerca de la ciudad, pero no en el centro, y, a la vez, la premisa del Ministerio de Fomento de no ubicar las estaciones dentro de las ciudades.

Por otro lado, Murillo explicó que el Ayuntamiento de Mérida conoció ayer el convenio firmado entre el Ministerio de Fomento y la Junta para la construcción de 335 viviendas en la zona de La Calzada.

AUDITORIA Al margen de esta cuestión, la junta local de gobierno también ha adjudicado a la empresa ADT la realización de una auditoría interna para conocer la situación económica del ayuntamiento. "Esta empresa ha presentado un proyecto muy interesante, por 98.000 euros, y muy completo desde el punto de vista técnico", indicó Murillo.

El compromiso es que haya redactada una memoria en el plazo de cinco meses desde la firma del contrato.