El ayuntamiento espera recaudar el próximo año 48 millones de euros con la recaudación de impuestos, a pesar de que han decidido congelarlos. Ni siquiera se aplicará la subida del IPC, que en Mérida supone una recaudación de 1,4 millones de euros.

Así lo explicó ayer el alcalde, Pedro Acedo, quien aseguró que no van a modificar ninguna de las 41 ordenanzas fiscales y ninguno de los cinco impuestos: impuesto de bienes inmuebles (IBI), impuesto de instalaciones, construcciones y obras (ICO), plusvalía e impuesto de vehículos.

Sí sufrirán una adaptación las tasas que se pagan por la Guardería Infantil y el Conservatorio, donde se establecerá una tarifa única y habrá descuento para las familias numerosas. También se modifica al alza la tasa del agua, por la que cada familia deberá pagar entre un euro y un euro y medio más al mes.