El Ayuntamiento de Mérida ha abierto un expediente informativo para estudiar las supuestas irregularidades del tren turístico de la ciudad en cuanto al servicio que ofrece, el trato a los usuarios o el cuidado del vehículo, y "si es necesario rescindir el contrato, se hará", dependiendo de lo que diga esa investigación, aseguró ayer el alcalde de Mérida, Angel Calle.

El edil señaló que el ayuntamiento ha recibido algnuas quejas de ciudadanos, tales como que el tren no para en su sitio habitual, vierte aceite o que el audio no coincide con el vídeo que emite para los turistas, indicó.