Sin acuerdo. Como cabía esperar por el desarrollo de las negociaciones, el consistorio y los sindicatos han cerrado las reuniones sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a 83 trabajadores sin alcanzar un consenso. Ahora, el consistorio deberá decidir si aplica o no la medida y en qué condiciones, si ejecuta los despidos previstos o se aplican las medidas de acompañamiento planteadas, como las reducciones de jornada o las jubilaciones anticipadas. El ayuntamiento manifestó en una nota que "los sindicatos han incluido condicionantes de imposible cumplimiento para la administración", mientras estos afirman que la administración no ha aceptado ninguna de sus propuestas --como reducir otros capítulos de gasto aparte del de personal o hacer reversibles las reducciones de jornada en el futuro-- y plantean la opción de recurrir a los tribunales para invalidar la iniciativa.

En un comunicado, la delegada de Personal, Leonor Nogales, detalla algunas de esas medidas inasumibles para el consistorio, desde su punto de vista, como la posibilidad de hacer reversibles las reducciones de jornada en el 2015 o aceptar todas sus propuestas, aunque no estuvieran vinculadas por el ERE. El alcalde, Pedro Acedo, había manifestado por la mañana que el consistorio había presentado una nueva propuesta el martes por la tarde, mejorando las condiciones del plan de acompañamiento, y criticó la escasa disposición de los sindicatos, a su juicio, de "mirar por el bien de los trabajadores".

Desde estas organizaciones, CCOO, con mayoría en el comité de empresa que representa a los trabajadores laborales afectados, anunció que recurrirá la decisión del consistorio en los tribunales y denunció que la administración no permitió la presencia de la Inspección de Trabajo en la reunión.

Para Luis López, de CSI-F, aunque las posturas se habían acercado en algunas cuestiones, como las condiciones de las jubilaciones anticipadas, no ha sido posible un acuerdo global porque la administración ha intentado imponer sus propuestas. Frente a las declaraciones del consistorio desacreditando la labor de los sindicatos --especialmente, de CCOO--, López cree que se ha intentado dividirlos y que los trabajadores saben que en todo momento se han defendido sus intereses: "Desde el principio, estamos celebrando asambleas dándoles los detalles de cada negociación". También Juan Carlos Matías, de UGT, insiste en que el consistorio no ha escuchado las sugerencias de los sindicatos sobre las reducciones. "Habrá que ver qué plantea la administración y si tenemos que recurrir a los tribunales", avanza en línea con López.

Por su parte, el concejal de Siex, Antonio Vélez, demandó ayer en una nota la "paralización del ERE" por entender que "roza la inmoralidad política", asegurando que "es más propio de un déspota que de un gobernante justo y humano".