El requerimiento de la Junta también incluía el expediente relativo al recinto del antiguo cuartel Hernán Cortés, donde el anterior gobierno proyectaba un complejo cultural y comercial, que también fue declarado nulo por el ayuntamiento.

Uno de los motivos que alegó la Junta, a través de la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural, fue la "incorrecta aplicación de la figura del contrato mixto", modelo que se usó en la firma con Joca-Dycex, unión de empresas adjudicataria de las obras, ya que abarcaba tres aspectos con una regulación normativa distinta cada uno.

Estos tres aspectos son la concesión de una obra pública para la construcción de usos dotacional cultural y administrativo; la constitución de un derecho de superficie sobre terrenos municipales para comercios, bares o negocios con plazas de aparcamientos para su financiación y la venta del subsuelo de una finca municipal para construir un aparcamiento de 300 plazas.

También señalan que no se puede atribuir el régimen jurídico del contrato de concesión de obra pública "a la enajenación del subsuelo y la concesión de un derecho de superficie. Es contrario a derecho y provoca la nulidad absoluta del expediente, por prescindir de los trámites esenciales".