Avanzan los trámites para llevar a cabo un proyecto de mejora integral en el Centro Sociosanitario Adolfo Díaz Ambrona de Mérida. La Consejería de Sanidad y Políticas Sociales convoca un concurso de proyecto con intervención de jurado para la ampliación de estas instalaciones, por un presupuesto de 17.545 euros (IVA incluido), y un plazo máximo de dos meses para que los miembros del jurado seleccionen a los premiados, ya que este concurso no conlleva necesariamente la ejecución de un contrato posterior. Las ofertas se pueden presentar hasta el próximo 27 de junio.

Esta intervención de mejora se financiará en un 80% con fondos europeos procedentes del programa Feder 2014-2020, lo que implica una «intervención urgente dado el carácter temporal de los fondos asignados». El valor estimado del contrato de servicios que pudiera adjudicarse posteriormente será de 260.662,73 euros, mientras que el presupuesto de licitación máximo que estima la consejería para la ejecución de las obras asciende a 4.761.783, 67 euros (con IVA).

Según se recoge en la memoria justificativa del expediente, debido a la «obsolescencia» de las instalaciones del centro, así como a las características de los pacientes que residen en este, se requiere de un «diseño conceptual» que demanda la contratación de un procedimiento «que verifique con garantías técnicas la calidad de la propuesta». El pliego contempla que el nuevo edificio se instalará en el interior de la parcela, ubicada en la carretera de Valverde, en lo que sería el terreno que ocupa el antiguo campo de fútbol. En la actualidad, el centro tiene capacidad para unos 260 pacientes y cuenta con 338 trabajadores.

El nuevo edificio tendrá una o dos plantas, de tipo «modulable y polivalente», y estará destinado a su uso futuro como centro de atención de enfermos crónicos. En función de las características de los pacientes se contemplan dos grupos: personas con características de psicogeriatría y personas con trastorno mental grave.

Las dependencias se distribuirán en cuatro unidades independientes. En concreto, la de servicios generales incluirá los módulos necesarios para el funcionamiento normal del centro, como vestíbulo, recepción, consulta, salas de espera y visitas, así como otra para reuniones. Otro de los espacios se destinará a dar cabida a tres unidades independientes para los residentes con trastorno mental grave. Cada unidad contará con 18 dormitorios dobles, un baño cada dos dormitorios, zona de enfermería para cuatro pacientes y una habitación individual especial próxima al control de enfermería, con cámara de video vigilancia.

La unidad de psicogeriatría tendrá 28 dormitorios dobles y un baño cada dos dormitorios, así como sala de curas, consultas y demás servicios. Por último, se destinará una unidad al área de cocina.