Nueve barriadas de la ciudad se han quedado sin buzón de Correos, por lo que a partir de ahora sus vecinos tendrán que desplazarse a la oficina de Marquesa de Pinares o la plaza de España para depositar las cartas en los míticos contenedores amarillos. La empresa ha tomado esta decisión «para ahorrar costes», según denuncia el sindicato CCOO. De los 25 buzones con que contaba Mérida se han retirado nueve: tres en Nueva Ciudad (calle Antonio Campos Hoyos, avenida de la Constitución y avenida de Los Rosales), dos en Bodegones (avenida Lusitania y plaza José Zorrilla) y el resto en San Lázaro (calle Bellavista), avenida Vía de la Plata, calle Calvario y plaza de la Constitución.
Los propios vecinos han dado la voz de alarma a través de las redes sociales. Según explica Pedro Sánchez Martín, delegado provincial de CCOO y responsable del sector postal en Extremadura, se trata de una medida que se aplicará en todos los grandes municipios dentro de un plan para «ahorrar costes» que el sindicato no entiende. «Cuesta más la retirada que mantener los buzones, si al final la furgoneta de reparto tiene que pasar todos los días por estos sitios», asegura.
20 CARTAS / La empresa alega que de estos buzones apenas se recogen unas 20 cartas, pero Sánchez recuerda que Correos ofrece un servicio postal universal y que con medidas como esta contribuye a crear «ciudadanos de primera y de segunda». El responsable de CCOO, que critica la falta de comunicación y diálogo por parte de Correos, asegura además que esta no es la única medida de recorte, a su juicio para «plantear un servicio deficitario a toda costa que va camino de la privatización».
Así, denuncia que se han desmantelado varias máquinas del centro de El Prado y que la empresa también se está planteando que el personal de Mérida se encargue del reparto de cartas en Calamonte y Arroyo de San Serván. Estos municipios mantendrían abierta la oficina, pero solo para la atención al público presencial.
